Como te hemos comentado alguna vez, una mente creativa aumenta sus posibilidades de éxito a la hora de poner en marcha un proyecto de emprendimiento: el toque de originalidad que aporta su idea sobre el sector o sobre el problema que resuelve hace que destaque entre su competencia.
¿Piensas que antes de lanzarte al mundo de las startups ya debes tener muy definidas tus ideas para emprender? La respuesta es no. Ni siquiera necesitas una idea.